No me he vuelto loco, la cita no es mía. Se trata de la última declaración del presidente del Banco Santander, don Emilio Botín, quien durante los fastos para celebrar la expansión de su negocio por los EE.UU. de América aseguró que “es un momento fantástico, a España le está llegando dinero para todo”.
Mantengamos la calma, hagamos como si no nos acabaran de escupir a la cara que no hay crisis, que todo es mentira, y que lo de la escasez y miserias es solo para algunos, y que, casualmente, esos algunos no son ellos.
Hagamos como si no acabaran de escupir a la cara de las decenas de miles de desahuciados a los que arrebatan la casa para mantener los márgenes de beneficio económico, hagamos como si no acabaran de escupir a la cara de todas las personas a las que han privado de su derecho a la asistencia sanitaria porque no hay dinero para mantenerla.
Hagamoslo, porque mucha gente defiende que tenemos que seguir financiando a la banca, tenemos que hacerlo porque son imprescindibles para que funcione el sistema, y claro, es nuestro deber velar por la supervivencia de un sistema que nos está masacrando.
Mantengamos la calma para poder seguir defendiendo que estos parásitos sociales son algo necesario, para que siga instalado en la sociedad el gigantesco Síndrome de Estocolmo que la hace adorar a sus opresores.
La banca internacional financia tiranos, represiones violentas, ocupaciones militares, saqueos de materias primas; financia y sostiene a este sistema que nos sangra. Todo con el único objetivo del lucro de unos pocos: son la mayor plaga que azota a la humanidad, y cualquier cambio que queramos emprender ha de pasar, necesariamente, por arrancarles el poder de sus manos chorreantes de sangre.
Pero no nos enfurezcamos, y mantengamos la calma.
Raúl Martín Fernández
Uf, es el artículo mas sarcástico y mas rabioso que te he leido.
Es que, como he leído por ahí, me están tocando los cojones por encima de sus posibilidades.
Botín tiene razón:
http://economia.elpais.com/economia/2013/10/31/actualidad/1383251680_096739.html
Otra cosa es que nadie invierta en mi jardín particular…
En nada contradice a la idea que quiere transmitir el artículo: claro que hay dinero, lo hay de sobra, y lo que demuestra esto es que la crisis no es más que un cuento para hacerse ellos más ricos mientras nos hacen a los demás más y más pobres.
ELEMENTAL. (C’est la vie.)
Dear Dr. Watson:
Que “ellos” se hagan cada vez más ricos no implica que nos hagan a “los demás” (Who??)más y más pobres.
Al contrario: la acumulación de riqueza (entienda usted por “acumulación” la cantidad que desee) es condición previa para la inversión, es decir, para la generación y reparto de más riqueza.
That’s life.
Mr. Botín y su Santander no han cobrado, que se sepa, un euro del FROB. Y, en general, la riqueza de los banqueros NO-FROBst (sin escarcha, como las neveras de alta gama) es perfectamente lícita, mientras no comercialicen productos con truqui. Chup, chup.
Me temo que no se pueda decir lo mismo de la riqueza casposa y escarchada de los cajahorreros. Pero, claro, estos tenían un fin noble: su obra social.
Y esta si que está construida contra nuestros patrimonios.
No se precipite y antes de contestarme, si tiene a bien hacerlo, fúmese tranquilamente un par de pipas, mejor que esos puros comunistas que tanto le gustan.
Aprovecho la ocasión para recordarle que debe usted ordenar a su banco girarme el alquiler de este mes de su habitación. Picarón. Es que no podemos vivir sin ellos…
La Señora Hudson (por encargo de su compañero Mr. Holmes.)
Me temo que sí, que el hecho de que ellos sean cada vez más ricos, nos hace a los demás más y más pobres. Me remito a las estadísticas que nos deja este periodo de crisis: 3 millones de pobres más y 400.000 millonarios más: el dinero circulante viene a ser más o menos el mismo, pero repartido de forma distinta.
En cuanto a la licitud de la riqueza del Santander… bueno, por mucho que no haya cobrado dinero público (que sí lo ha hecho, aunque solo haya sido con sus evasiones fiscales, legales e ilegales) no quiere decir que su riqueza sea lícita: se trata de una riqueza que proviene de la especulación financiera, con la que se arruinan empresas e incluso países enteros, que proviene de la inversión en industrias altamente contaminantes o que explotan impunemente seres humanos en diversos lugares del planeta, que proviene de la inversión en armamento… no, no es una riqueza lícita la del señor Botín, ni mucho menos.
Señora Hudson, el dinero se lo pagaré en mano, no hay porque alimentar innecesariamente a la banca.